Uno de los principales dogmas del pensamiento intervencionista es el de la ayuda al desarrollo. Lejos del mundo liberal, es difícil encontrar a quien mantenga una actitud como mínimo crítica
Pero, en realidad, ¿Cuántos impuestos pagamos? ¿Son algo que pagan los ricos mientras que nosotros, humildes trabajadores, apenas si contribuimos al fondo común? Los políticos nos hablan de los beneficios