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El sector público se aúpa como el mayor deudor de España en 2014

Publicado en Libertad Digital

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En 2008, la inmensa mayoría de la deuda española era deuda privada: veníamos de una burbuja de endeudamiento barato financiada por ese monopolio público llamado BCE y los pasivos de las Administraciones Públicas apenas suponían el 18% del total, mientras que los pasivos de familias y empresas no financieras ascendían al 82%.

Fruto de aquellos polvos, los distorsionados lodos actuales. Tras cinco años de crisis, el sector privado ha ido desapalancándose con fuerza (382.000 millones de euros de menor deuda, desde finales de 2008), y el sector público ha pasado a hiperendeudarse (560.000 millones de mayor deuda desde entonces), con lo que la radiografía del endeudamiento en España debe cambiar. 

A junio de 2014, y a partir de los datos del Banco de España, la deuda privada familiar es de 772.000 millones de euros, la deuda privada empresarial es de 0,98 billones de euros y la deuda pública de 1,058 billones de euros. Conviene aclarar que los algo más de 50.000 millones de pasivos de empresas públicas los he incluido, a diferencia de lo que hace el Banco de España, entre la deuda pública y no entre la deuda privada empresarial.

De este modo, los porcentajes cambian un poco: la deuda pública ya no es el 18% del total, sino el 37,5%, y el peso de la deuda empresarial cae del 48% al 35%. A partir de enero de 2014, el sector público pasó a ser el sector institucional con más deuda en España, superando no sólo al sector de las familias, sino también al de las empresas no financieras.

Tal vez deberíamos pensárnoslo dos veces antes de afirmar que el problema de España es la deuda privada y no la deuda pública. Evidentemente, la deuda privada es un problema, pero la deuda pública también es un problema. Diría más, la deuda privada va siendo cada vez un problema menor, mientras que la deuda pública se está convirtiendo en un problema expansivamente mayor. Confío en que el último gráfico termine de aclarar el muy peligroso camino que estamos siguiendo.

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