Inolvidable Dora, no hay palabras suficientes en las novelas, ensayos y poemas para agradecer todo lo que has hecho, haces y continúas haciendo por la libertad.
En estos difíciles momentos, cuando el olor de la pólvora y la sangre del aberrante atentado de París no se han disipado del todo, resulta indispensable hallar una respuesta enérgica