El comisariado
Con el fin de atomizar a los individuos, es decir, de convertirlos en entes sin capacidad de raciocinio independientes (en el mal sentido) de los demás, los regímenes dictatoriales deben dividir a la población. ¿Les suena?
Con el fin de atomizar a los individuos, es decir, de convertirlos en entes sin capacidad de raciocinio independientes (en el mal sentido) de los demás, los regímenes dictatoriales deben dividir a la población. ¿Les suena?
Durante muchísimos años (y muchas veces aún hoy), en España todo lo que no fuese ir a la universidad era visto como un fracaso, lo que ha provocado unas tasas de estudiantes universitarios enormes y totalmente alejadas de la realidad del mercado laboral,
De manera directa, me atrevo a afirmar que estamos ante una nueva ronda en el histórico debate del cálculo económico socialista. El clásico enfrentamiento que tuvo lugar en el siglo
En fechas donde hacemos memoria de nuestra Constitución siempre reflexiono sobre este marco y sobre ello escribo. En noviembre de 2017 escribí esto que comparto. Nuestra misión, al menos la
La proliferación de organismos que supuestamente sirven para controlar o fiscalizar al gobierno y a la administración, pueden difuminar o incluso entorpecer la exigencia de responsabilidades políticas, administrativas o penales de los gobernantes y gestores públicos.
Las nuevas generaciones de chilenos que han crecido en ese estado de bienestar que les ha proporcionado su país no han conocido la decadencia, el sufrimiento de la migración, las colas del hambre o las cartillas de racionamiento. Han votado a un presidente que defiende un modelo probadamente fracasado en el mundo y, más aún, en una región que se empecina en repetir sus mismos errores una vez tras otra.
Para muchos liberales su principal preocupación es reducir los impuestos, como si así se alcanzase una mayor libertad. El debate es otro. Los viejos libertarios solían usar la metáfora del amo bondadoso que mejora la vida de su esclavo incrementando su estipendio y dejándole cierta libertad de gasto.
Hay miedo a dejar vivos grupúsculos de personas, en principio, sin importancia, que con el tiempo puedan convertirse en antagonistas de peso que supongan un verdadero desafío para quienes detentan el poder.
Siempre ha habido ideas enfrentadas y siempre ha habido conflictos entre los que piensan una cosa y la contraria (o la que consideran que es la contraria), pero desde hace dos décadas, cada vez son más los criterios que dividen a unos contra otros.
La base de la cultura es el relato. Y, por muy manoseada que esté hoy en día la palabra, lo cierto es que el poder del relato es casi absoluto.