La utilidad, asesina del valor
La necesidad insatisfecha, la escasez, el valor, es previo a establecer la relación “objeto satisface necesidad”, es decir, a la utilidad.
La necesidad insatisfecha, la escasez, el valor, es previo a establecer la relación “objeto satisface necesidad”, es decir, a la utilidad.
Acemoglu y Johnson, por un lado, y, por Acemoglu y Robinson, por otro, han tratado -en resumidas cuentas- de la relación entre las instituciones y la prosperidad económica
Las tres Reales Academias, la de la Historia, la de Ciencias Morales y Políticas y la Española, a las que perteneció Juan Valera, no han aprovechado la efeméride de su bicentenario para destacar su figura y su obra como debieran merecer. Y tampoco se ha hecho ningún esfuerzo institucional en relación con este aniversario por los responsables culturales nacionales, autonómicos o locales. El Ateneo de Madrid, a la que perteneció entre 1844 y 1905, es decir, socio durante más de sesenta años, si lo ha hecho.
Que Trump se haya sometido a tres horas de podcast con Rogan no es algo menor. De hecho, es un hito sin precedentes. Tres horas de entrevista no guionizada con un político de ese nivel a pocos días de unas elecciones hubiera sido ciencia ficción hace diez años.
Trump promete que su «uso inteligente de los aranceles» restaurará la fabricación estadounidense, pero las estimaciones muestran que los aranceles costarían al hogar estadounidense típico más de 2.600 dólares al año.
Los políticos deben reconocer que el crecimiento económico y la descarbonización dependen de abrir puertas, no de levantar barreras. Demos la bienvenida a los vehículos eléctricos asequibles, vengan de donde vengan
España sufre de titulitis aguda. Es extraño el caso en el que algún español no ha rechazado una argumentación o la labor de una persona, por más buena que fuera,
La obra de Acemoglu, Robinson y Johnson, por sus trampas y errores, seguramente no merezcan un Premio Nobel.
El 12 de mayo de 2017, en Hostafrancs, (Barcelona) se funda el Sindicat de Llogatres (Sindicato de Inquilinos) con el objetivo de hacer frente al incremento de los precios del alquiler y la especulación inmobiliaria.
Para llegar a esta conclusión que le costaría la vida, Kondratieff utilizaba una serie de más de una veintena de indicadores, entre los que destacan—por la importancia que les daba el mismo economista—el nivel general de precios y el tipo de interés