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No hay colegios sin religión

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Los colegios son centros religiosos y quizá siempre lo serán.

La religión católica tuvo un espacio bastante reducido en mi infancia. Estoy bautizado e hice la comunión, pero en el día a día no noté su presencia demasiado. 

De hecho, las visitas a mi pueblo paterno siempre me proporcionaban cierto asombro al ver cómo allí los ritos católicos estaban mucho más presentes. El ave María purísima, acompañado siempre (pero siempre, siempre) por un sin pecado concebida, pronunciado por otra persona, eran algo que me fascinaba. 

Esta visión, casi antropológica, de la religión formal ha influido en que no haya desarrollado la muy común fobia que muchos ateos la profesan. De hecho, en mi caso, los rituales más traumáticos en los que tuve que participar fueron laicos. Por ejemplo, como aquella vez que en mi colegio público decidieron obligarnos a llevar un juguete bélico para quemarlo en una gran hoguera mientras Libertad sin ira sonaba a todo trapo a través de unos altavoces cutres.

Un espléndido revólver de vaquero cayó ese funesto día. No es algo que un niño perdone fácilmente. 

Mucha gente piensa que los rituales laicos no son parte de una religión. Es fácil demostrar su error. El próximo día que alguien hable de una operación o ingreso hospitalario en un hospital público y añada la típica coletilla de “¡qué gran sanidad pública tenemos!”, pruebe a no responder nada y experimente en gran silencio incomodo que se crea en la sala.

Es el silencio que nace de comprobar que no estás entre los tuyos. Y aquí la opinión que se tenga sobre la sanidad pública es indiferente. De igual forma que importa poco cómo fue concebida la Virgen María. Es algo que debe decir para señalizar pertenencia a un grupo moral.

Por eso sorprende la polémica que se produce todos los veranos con la inclusión en algún colegio de la religión islámica. ¿Se debe facilitar a una religión foránea recursos públicos para su enseñanza? ¿Se debe seguir haciendo con religiones autóctonas? ¿No deberían ser los colegios unos centros de enseñanza de conocimiento y ética, donde la moral se quede en casa?

El debate sería interesante si la moral hubiera estado alguna vez fuera de las aulas. La realidad es que a la religión católica se la relegó a un espacio concreto a cambio de tener camino libre para la moral política dominante en el resto de las asignaturas. Incluso colegios católicos han ido adoptando esta nueva moral, relegando a la suya cada vez más a aspectos superficiales.

La táctica de permitir a la iglesia católica tener una presencia simbólica y monopolista en la educación mientras era laminada de la vida de los estudiantes ha sido uno de los éxitos más claros de la izquierda en España. Y la mejor prueba de ello es que la indignación en el sector católico nace al perder el monopolio, no por lo simbólico de su presencia.

Hoy empiezan las clases de nuevo en gran parte del país. La fiscalía del PSOE ya ha advertido a los padres de que la salud de su familia no es más importante que llevar a sus hijos al colegio. Esas amenazas no suelen venir de un Estado que ama la enseñanza de las matemáticas, sino de otro que sabe dónde se empieza a inculcar la religión que le dota de legitimidad y poder. 

Los colegios son centros religiosos y quizá siempre lo serán. Dejar de enfocarse en la hora semanal de religión formal, y poner el foco en el resto de moralidad que se impone a los estudiantes, y sus familias, parece un camino bastante más inteligente para aquellos a los que de verdad les importa la libertad y la educación de sus hijos.

9 Comentarios

  1. Se puede leer en el evangelio
    Se puede leer en el evangelio que no se puede servir a dos amos, porque las órdenes de uno contradicen las órdenes de otro. La conclusión de esta parábola es que tampoco puede servirse a Dios y al dinero.

    He visto muchos grupos católicos desarrollar proyectos empresariales en el área de la educación (en todos los niveles) que rechazan la mayor parte de las doctrinas teológicas de su iglesia, pero aceptan algunas doctrinas sociales y políticas de la misma. Además, en caso de conflicto entre dichas doctrinas con las órdenes políticas de cada momento, siempre se inclinan por seguir la última innovación de los políticos. Porque son ellos quienes pagan, y no la jerarquía religiosa arcaica.

    Eso sí, todo es muy solidario. En sus centros educativos siempre se ven fotos de negritos comiendo arroz que han sacado de un barreño de plástico que los agentes de la ONG emplean para servir las raciones a los que hacen cola. Ese arroz, ese barreño, toda esa justicia social tan fotogénica es pagada gracias a la ignorante colaboración de las víctimas de la metarreligión moderna llamada solidaridad.

    Laico significa popular. Laicista debería significar populista. La religión solidaria es un timo populista. Uno más. La incalculable cantidad de sandeces que hemos soportado desde la guerra de los balcanes hasta hoy se puede ver como una guerra de religión, que es una guerra sobre el monopolio de un territorio y sobre unos recursos, en particular el recurso más importante y valioso: la mente del hombre.

    Realmente, la educación obligatoria moderna no es tan distinta a las pasadas circuncisiones obligatorias, o las conversión obligatorias, o las masacres de aquellos que querían salirse de la sociedad y del mundo. No tiene nada que ver con la transmisión de valores ni con la transmisión conocmientos factuales. Es pura irracionalidad política. Es decir, un pilar de la religión política.

  2. Adjunto entrevista a Cristina
    Sin libertad educativa (que implica pluralidad y diversidad de proyectos compitiendo por atraer a los padres y a los alumnos que libremente los elijan), no hay democracia liberal ni nada que se le parezca, sino totalitarismo.

    Curioso ritual ese de obligar* a los niños a llevar un juguete bélico para quemarlo en una gran hoguera mientras sonaba a todo trapo a través de unos altavoces cutres «Libertad sin ira» (https://genius.com/Jarcha-libertad-sin-ira-lyrics ). Parece una escena sacada de 1984 o Un mundo feliz. Ese monopolio educativo que nos encasquetaron por aquella época (y del que ahora podemos ver sus efectos devastando generaciones –incluso naciones– enteras) no deja de ser sino un paso hacia ese totalitarismo globalista y castrador al que nos conducen como ovejas unas supuestas élites autonombradas.

    Adjunto entrevista a Cristina Martín, quien ya señaló hace unos años hacia esa III Guerra Mundial en curso: https://www.actuall.com/entrevista/democracia/la-mujer-desenmascaro-al-club-bilderberg-actuall-rajoy-no-mason-se-comporta-tal/

    (*) A personas a quienes se criminaliza e intenta ridiculizar por solo pretender «vivir su vida, sin más mentiras, y en paz» (yo firmaría).
    PD.- Por cierto que entonces «la había» (por casualidad, o por lo que fuera, por lo menos bastante más que hoy en día), como en realidad inconscientemente reconocía la propia canción:
    «Porque hay libertad
    Sin ira libertad
    (aunque luego parecía dudar y replanteárselo:…)
    Y si no la hay sin duda la habrá.»

    • 1º) Hace años oí comentar que
      1º) Hace años oí comentar que esa canción de «Libertad sin ira» se hizo como parte de la campaña de lanzamiento de un nuevo periódico, creo que Diario 16. Y luego se les fue de las manos, y esa canción ha estado atormentándonos desde entonces.
      ¿Alguien sabe si esto es cierto?

      2º) La constitución española establece como derechos fundamentales la educación, la libertad de enseñanza (no sé lo que es eso) y la sindicalización libre. Obviamente aparece un conflicto entre estos derechos. Porque los profesores quieren un trabajo seguro y bien pagado y con prebendas, idealmente hasta conseguir un monopolio total[1], y para lograrlo «compran» los servicios de acoso y derribo legislativo de los sindicatos. Pero esto está en contra de los intereses de los educandos y de los legítimos intereses de otros profesores, que quieren trabajar educando a gente sin pasar por los innumerables aros de lo público.

      Una persona bisoña recién salida del bachillerato pensaría que el legislador ha encontrado la manera justa de equilibrar ambos derechos fundamentales. En cambio, los despiertos sabemos que al poder político le interesa que haya problemas sin resolver, ambigüedades, disputas, división, caos. Vamos, lo que la gente llama habitualmente «anarquía». No puede haber ese tipo de anarquía (y hasta anomia) sin un gobierno fuerte y rozagante y un poder legislativo que está en la cama con los enemigos del pueblo. Solo así se puede uno merendar a gusto a las clases medias.
      Cualquier conflicto entre derechos se resuelve siempre a favor del gobierno y sus amiguetes, y en contra del pueblo soberano. El desastre de la educación en España va en perfecta armonía con el desastre del empleo, el desastre bancario, el desastre moral y el desastre de las pensiones, con su respectiva burbuja recién reventada.

      Democracia totalitaria deberían llamar al periodo que van entre 1946 y 2020. No sé lo que nos espera, pero a menos que los padres se preocupen por dar a sus hijos la información que realmente necesitan, el futuro no es halagüeño (¿ha notado la diéresis sobre la letra u? ¿se sigue explicando la diéresis?)

      3º) Una famosa cita de Manuel Azaña: «The tree of liberty must be refreshed from time to time with the blood of patriots & tyrants, for it is it’s natural manure»[2]. He puesto que era de Azaña para que los sectarios presten atención.

      Paz, piedad y perdón.

      La paz es la guerra, según el partido demócrata americano, que apoya a los revolucionarios de Seattle. Pronto todos los partidos progres de Europa repetirán esa locura.

      La piedad es un concepto blanco-hetero-patriarcal que destruye el medio ambiente y acelera el desastroso cambio climático. Debe ser descartado en el debate serio.

      El perdón es algo que solo ocurre cuando el presidente de una corrida de toros decide indultar a un bravo, ante la unánime petición del público. Esto es una aberrante forma de maltrato animal, así que no hay perdón tampoco.

      Concluimos que Manuel Azaña era un peligroso franquista, según la ilógica imperante del 2020. Esa es la nueva anormalidad.

      Conclusión:

      Yo esto lo veo muy malamente, la verdad. Pero no desespero. La libertad volverá. Quizás no estemos aquí para recibirla. No pasa nada. Merecerá la pena luchar y morir por la libertad durante el tiempo que haga falta, cuando por fin los humanos vuelvan a vivir humanamente.

      Y ahora me voy a escuchar a Brassens, gran liberal.

      ___________________________

      Notas:

      [1] Es bien sabido que muchos profesores hablan abiertamente de prohibir la privada y la concertada, incluyendo las academias de repaso.
      [2] Cita atribuida a Thomas Jefferson, figura histórica desconocida en España. Así nos ha ido, por esa generalizada ceguera voluntaria.

    • Referencias:
      Referencias:
      – «Paz, piedad y perdón», discurso de Manuel Azaña en 1938: https://es.wikipedia.org/wiki/Paz,_piedad_y_perd%C3%B3n
      – A Thomas Jefferson (https://es.wikipedia.org/wiki/Thomas_Jefferson ) y su compleja personalidad, y en especial, a la necesidad que señaló de limitar al poder para salvaguardar la libertad, creo que ahora ya no los conocen ni en los propios EEUU.
      – «Otros» rituales de la nueva religión estatal desvelados por Alberto Bárcena en «La boca del lobo» de Radio Ya: https://www.youtube.com/watch?v=0e6ews_5O_0
      – En esta entrevista breve («Últimas palabras con Richard Rorty», Letras Libres) se puede encontrar resumido el por qué de esa estrategia o necesidad de «sustituir la religiosidad cristiana» y cualquier asomo de verdadero pluralismo por parte de ese totalitarismo que presume de democrático: https://www.letraslibres.com/mexico/ultimas-palabras-richard-rorty

    • Gracias por sus referencias.
      Gracias por sus referencias. Apostilla usted muy bien.

    • – Sobre el «golpe» del COVID
      (a) Sobre el «golpe» del COVID-1984, y cómo quitarnos las ataduras (basadas en mentiras) con que el «hombre de Davos» nos somete, Angelo Codevilla: https://www.independent.org/publications/article.asp?id=13233&omhide=true

      (b) Los romanos no inventaron casi nada, con un par de excepciones. La más genial, el DERECHO PRIVADO ROMANO (o con más precisión, las ‘instituciones’ emergentes que la actividad privada de los jurisconsultos con sus opiniones vinieron a validar o reconocer como ajustadas a derecho, al Ius, en cada caso).

      Fueron los romanos los primeros en separar el Ius del Fas (la norma u obligación jurídica de la norma religiosa o moral). Un gran avance: https://www.derechoromano.es/2013/07/ius-fas-boni-mores.html
      … que veinticinco siglos después legiones de «expertos», casi todos financiados por el Estado, quieren borrar, para pasar a instalar una nueva y «oficial» VERDAD ÚNICA (moral, científica, religiosa… la «nueva normalidad» parece ser que le llaman), que decidirán obviamente ellos (o sus financiadores).

      Por ejemplo Richard Rorty (en la estela de Dewey y, parece ser, Habermas) señala en esas sus últimas palabras (ver arriba el enlace) la estrategia para implementar la utopía social-demócrata a la cual se adscribe, pr un lado dejando de lado cualquier epistemología, y por otro llamando a sustituir y reemplazar la religiosidad cristiana, con estas palabras :
      – El Papa (Benedicto XVI) dijo recientemente: «En Europa se ha desarrollado una cultura que es la más radical CONTRADICCIÓN, no solo para la cristiandad, sino PARA TODAS LAS TRADICIONES religiosas y morales de la humanidad.»
      – «Dewey y Habermas (y Rorty, que asume el papel de portavoz) habrían replicado que la cultura que surgió de la Ilustracón ha respetado todo lo cristiano que ha valido la pena respetar. Occidente (también se presenta como «portavoz» de Occidente, dejando de lado la mayor parte de su historia y los pilares de los que nació y sobre los que se sustenta) ha improvisado, en el curso de los últimos doscientos años, una tradición moral específicamente secularista (la que considera el libre consenso de los ciudadanos de una sociedad democrática, EN VEZ DE LA VOLUNTAD DIVINA, como fuente de imperativo moral).»

      (c) En este sentido es plenamente aplicable lo que dice Wendy McElroy en «Lidiando con la vanalidad del mal» (Grappling with the banality of evil): https://mises.org/library/grappling-banality-evil

    • Sobre las diferentes fases
      Sobre las diferentes fases (y corrientes, y aspectos: epistemológico, moral, político…) de la cultura que surgió de la Ilustración, son muy instructivas las 7 primeras lecciones o semanas del curso on-line gratuito «Moral Foundations of Politics» de Ian Shapiro (Yale): https://www.coursera.org/learn/moral-politics

      La conclusión del curso es que el ‘proyecto de la Ilustración’ necesariamente debía resultar fallido porque no se puede justificar un «deber ser» (moralidad) a partir de un ser (los hombres como son actualmente). Y también apunta Shapiro al motivo (aunque quizás no de da cuenta de toda la trascendencia y el alcance de este desfase que señala): «nosotros hemos heredado los principios de la ética de una tradición más antigua, pero al tomar la tradición de la Ilustración hemos abandonado el marco de referencia intelectual dentro del cual tenía sentido» .

      Y es que debajo de la tradición ética más antigua (aristotélica) subyacía un esquema teleológico con tres aspectos: (a) la naturaleza humana tal como la encontramos, sin tutorizar, inicialmente discordante con (b) los preceptos de la ética y (c) la naturaleza humana como podría ser si realizase su ‘telos’. Cada uno de esos tres elementos necesita referencia a los otros dos para ser inteligible (en cuanto a su naturaleza y en cuanto a su función). Por eso Aristóteles y Platón y otros escribieron libros repletos de comentarios sobre la educación de los niños, y sin embargo Rawl, Nozick, Bentham no dicen de educación prácticamente nada.

      Sin embargo el tema o semana (8ª) última del curso resulta bastante decepcionante (en la línea de Rorthy y la corrección política hoy dominante), pues Shapiro «coloca» su solución aprisa y corriendo sin responder incluso a la pregunta de su alumna: ¿y las limitaciones al poder, a un posible totalitarismo de la mayoría? Esta pregunta de su alumna tiene mucho sentido (todo el sentido del mundo), tanto en el campo epistemológico como en el campo político (pues la solución de Shapiro sin más, aboca o abre el camino a un monopolio moral excluyente e injustificado y a un nuevo totalitarismo).

  3. A este niño americano, por
    A este niño americano, por jugar en su casa con una pistola de juguete delante de la pantalla de su ordenador durante una clase on-line (y no sabía que le grababan), le enviaron a la Policía a su casa y lo querían expulsar del colegio: https://www.buzzfeednews.com/article/ellievhall/black-student-suspended-toy-gun-virtual-class
    Menos mal que los padres, con buen criterio, le están buscando un colegio concertado…


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