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Clásicos Populares

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Fernando no ha adoptado ese tono fúnebre que se gastan en Radio 2, que bien parece que los locutores, en vez de dar paso a una genial creación humana parece que vayan a dar la peor de las noticias. No, Argenta, con su inseparable Araceli, ha hablado con pasión de la música y ha tratado con total naturalidad tanto al oyente como al "viejo peluca" o al "sordo genial".

No es que los nuevos responsables de la empresa pública hayan cambiado de criterio sobre lo que debe ocupar esa franja horaria en la primera cadena pública de radio. Es, simplemente, que Argenta tiene más de 58 años y, en consecuencia, entra en el plan de adelgazamiento de la pública emisora.

La noticia es penosa, como feliz ha sido la noticia diaria de su emisión, y especialmente por un período tan prolongado. No es que esté yo en contra de su plan de despidos, ya que los medios públicos los hacía yo adelgazar hasta cerrarlos por completo.

Pero Clásicos Populares es el gran contraejemplo de la realidad precisamente de estos medios públicos. La razón de ser de ellos es la de voceros del poder de turno. Por un lado se justifica su existencia simplemente uniendo las palabras "servicio público", pero la realidad es que el mismo día en que una ley prohibiese la emisión de contenidos informativos en los medios públicos, iban a anunciar su cierre inmediato. Hay muchos grupos, muy voraces, deseando llevarse los pastizales que Gobierno y Comunidades Autónomas se dejan en sus órganos de propaganda, y si no pudiesen seguir utilizándolos preferirían destinar ese mismo dinero a satisfacer a clientelas políticas.

Los medios públicos imitan a los privados en las fórmulas que dan dinero y se justifican aludiendo a su necesidad de sobrevivir económicamente. Pero ni compitiendo deslealmente con los medios privados ni poniendo al servicio del político de turno millones y millones de euros tienen viabilidas económica los TVE o canal autonómico de turno.

El programa de Argenta, que a nadie molestaba, era una buena excusa para el mantenimiento de la siempre Radio Nacional de España. Se ha esfumado ya, y muchos la echaramos de menos.

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