Skip to content

Paulino y Román, contra el interés social

Compartir

Compartir en facebook
Compartir en linkedin
Compartir en twitter
Compartir en pinterest
Compartir en email

ROMÁN Rodríguez, expresidente del Gobierno de Canarias, le dijo al actual presidente, Paulino Rivero, cuando este anunció la expropiación de viviendas a la banca, que «no se amedrente si le llaman comunista», y además le animó a hacerlo con las palabras mágicas que usan los políticos cuando quieren justificar un expolio: el «interés social».

El señor Rodríguez no debe de saber que ser comunista no es ni malo ni reprobable. Las personas que deciden vivir en una comuna merecen nuestro respeto. Sin embargo, quien es condenable es aquel que intenta imponer el comunismo a toda una sociedad, como lo han hecho muchos tiranos justificándose con palabras como interés social o general para ir contra los derechos individuales. Por lo que tanto el presidente como el expresidente de Canarias no deben de saber que el interés individual jamás debe ir contra el interés general, de la misma forma que el interés general no debe ser usado contra los derechos individuales, pues es de interés general o social que estos se respeten.

Cuando estos derechos no se respetan, las consecuencias son terribles para la sociedad. Tal es el caso, que los balances de la banca española, que ya hoy se encuentran falseados con una sobrevaloración de sus activos inmobiliarios, sufrirán un batacazo importante tarde o temprano, porque unos activos que han sido expropiados durante tres años para ser usados valdrán muchísimo menos cuando sean devueltos.

Alguno podría decir «que se fastidie la banca». Sin embargo, los que sufriremos las consecuencias somos todos. Por una parte, disminuirá todavía más el crédito, tan necesario para que los empresarios puedan invertir y crear nuevos puestos de trabajo, y por otra, las entidades bancarias que decidan prestarnos dinero lo harán con mayores tipos de interés, al existir la posibilidad de que algún gobernante iluminado pueda expropiarles lo que en derecho se conoce como derecho de garantía.

Además, lo que aún es peor, dado que el agujero bancario será aún mayor, estos mismos políticos, que atentan contra los derechos de los ciudadanos alegremente y la seguridad jurídica, volverán a recapitalizar a la banca con cargo a los contribuyentes para evitar el corralito al más puro estilo argentino.

Esta claro que todo esto, que sí es de interés general, poco les importa al presidente y expresidente de Canarias, pues lo que parece que a ellos les interesa es seguir cobrando grandes sueldos a costa del contribuyente y poder seguir haciendo y deshaciendo en las Islas. Es decir, usan sus intereses individuales para ir contra los intereses generales, mientras nos dicen que lo hacen por nosotros.

Más artículos

Populismo fiscal

Cómo la política impositiva del gobierno de Pedro Sánchez divide y empobrece a la sociedad española El nuevo informe del Instituto Juan de Mariana evalúa la deriva de la política