Skip to content

Viva Alfonso Cuarón

Publicado en Libertad Digital

Compartir

Compartir en facebook
Compartir en linkedin
Compartir en twitter
Compartir en pinterest
Compartir en email

Tuvimos que esperar a la clausura para que el nuevo vicepresidente de la Confederación Internacional de Sociedades de Autores y Compositores (CISAC), el director de cine Alfonso Cuarón, dijera que había que pensar en "nuevas ideas" para luchar contra la piratería, como bajar los precios de los discos y películas. Por mucho menos los titiriteros patrios crucificaron en su día a Alaska.

No cabe duda de que resulta complicado competir con lo que se ofrece gratis, pero no es imposible. Es evidente que el primer paso ha de ser bajar el precio, aunque quizá ese paso, de producirse, llegue un poco tarde, porque según han ido pasando los años y los insultos de las empresas a su clientela, el ánimo de adquirir productos legales ha disminuido un pelín. Pero las empresas tienen una oportunidad, porque no todos los costes son monetarios. En el caso de las descargas P2P, hay que buscar lo que queremos bajarnos, cosa no siempre fácil, y en ocasiones intentarlo de nuevo porque algún graciosillo le ha puesto el título del último estreno a una peli porno. Además, la descarga entre pares, aunque cada vez más rápida, no puede competir con la descarga directa.

Un buen ejemplo podría ser la tienda rusa AllOfMP3, que desgraciadamente está en vías de extinción después de que las empresas discográficas presionaran a Visa y Mastercard para que dejaran de trabajar con ella. El sitio web ofrece descargas muy baratas, de forma legal según las leyes rusas, y dispone de un interfaz cómodo, pudiendo escuchar la música a baja calidad para decidir qué comprar y qué no. Tanto Eduardo Pedreño como yo, pudiendo descargarnos todo con la mula o el torrente, preferimos hacerlo pagando, para ahorrarnos esos otros costes no monetarios. O al menos lo hicimos mientras nos dejaron.

Por tanto, parece que lo que sugiere Cuarón, pese a no ser exactamente "nuevas ideas", supone un soplo de aire fresco dentro del cerradísimo mundo de las sociedades de gestión de derechos de autor. Tanto, que le perdonamos al director de la extraordinaria Hijos de los hombres la estupidez de comparar la piratería con el terrorismo y sugerir, con la equivalencia, que está bien eso de pactar con terroristas. Como diría Enrique Dans, parece que hay algo, quizá no mucho, de vida inteligente al otro lado del túnel. Habrá que esperar a ver si no es más que un brindis al sol o termina traduciéndose en hechos, que es lo que de verdad importa.

Más artículos

Populismo fiscal

Cómo la política impositiva del gobierno de Pedro Sánchez divide y empobrece a la sociedad española El nuevo informe del Instituto Juan de Mariana evalúa la deriva de la política