Jobs, el libertario
No en vano, era un admirador de Ayn Rand. Uno de sus discursos más famosos recuerda mucho al magnífico alegato final de Howard Roark en El Manantial, novela de esta brillante autora. Y es que Jobs
No en vano, era un admirador de Ayn Rand. Uno de sus discursos más famosos recuerda mucho al magnífico alegato final de Howard Roark en El Manantial, novela de esta brillante autora. Y es que Jobs
El pequeño corso Naboulione sentía un odio visceral hacia los franceses. Unos meses antes de venir al mundo, Córcega había sido vendida por la república de Génova a Francia como
Son el no va más de la parasitología, parásitos capaces de modificar el comportamiento de sus huéspedes tomando el control de sus cerebros y haciendo que sus víctimas se comporten
Hayek, con la brillantez que le caracteriza, explica claramente cómo los resultados del proceso histórico son impredecibles para los individuos, y que, en consecuencia, es imposible atribuir los resultados observables
Conviene hacer una distinción entre la predicción que realiza el empresario y la que realiza el científico económico. La predicción científica (cuantitativa) no es posible en el campo de la
España, durante estos 8 años de gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, poco se parece a la que heredó de José María Aznar. Durante este periodo desde las instancias gubernamentales
El laicismo, se nos dice, lejos de ser un arma contra tal o cual religión, es una garantía del respeto del Estado a la conciencia individual y es la base
Para quien haya seguido durante estos meses las noticias sobre la crisis financiera y económica que padecemos, no habrá pasado desapercibido que los conceptos mercado y neoliberal se han usado
No es muy común, aunque a veces suceda, que un opinador profesional, un lego en la materia con vagas nociones y poca profundidad en los conceptos, se aventure a comunicar
Ha sido una de las grandes películas del verano. El Origen del Planeta de los Simios, "precuela" de la mítica película protagonizada por Charlton Heston, nos explica cómo los simios