Izquierda antidemócrata
También ocurrió con la Revolución de Asturias de 1934, como reacción contra la entrada de tres ministros de la CEDA en el Gobierno de Lerroux.
También ocurrió con la Revolución de Asturias de 1934, como reacción contra la entrada de tres ministros de la CEDA en el Gobierno de Lerroux.
Para que una política pública tenga justificación, se necesita una opinión pública favorable.
Será el individuo el que soportará, con el sudor de su frente y sus impuestos, los dislates y bravuconadas de los políticos.
El liberalismo ofrece muy poco en comparación con lo que prometen los estatistas.
Los partidos de centro derecha tienen dos opciones: aceptar las líneas rojas de la izquierda, y por tanto reforzarlas, o romperlas.
No hay evidencia de que una mayor centralización en España pudiera conducir a un menor peso del Estado.
Problemas como el inmigración no pueden ser resueltos por los Estados sin violar algún tipo de libertad o sin imponer costes a terceros.
Las grandes mayorías que sostienen enormes errores económicos terminan imponiendo a los demás sus nefastas ideas.
El consenso, el acuerdo en compartir unas normas que valen para todos, es lo que le otorga valor al texto.
La Constitución no marca fronteras nítidas y estrictas al poder político, sino que le exige entrometerse en la esfera de libertad de las personas.