Están estos señores enfadados por el hecho de que vayan a perder el monopolio de la venta de la Lotería Nacional y otras apuestas del Estado. Seguramente tengan razón en
Ni el lector de esa clase de subliteratura recuerda a finales del año siguiente lo que los astros pronosticaban para ese ejercicio, ni el votante de izquierdas tiene suficiente "memoria