Pese a lo que pudiera parecer, la aparición de un partido político populista como Podemos no es novedosa. En periodos de inestabilidad económica y/o política siempre surgen partidos que proponen políticas de gobierno populares que tienen por objetivo ganarse la simpatía de la población aunque sean claramente irrealizables o antidemocráticas.
De llegar al poder (que ocurre pocas veces) suelen acabar en dictaduras (reales o disfrazadas de democracia). Platón ya indicó el momento en que la democracia pasa a tiranía: los demagogos se apoderan del gobierno y comienzan a esquilmar las arcas del Estado, con la aquiescencia del pueblo, que espera recibir su parte.
Las propuestas de Podemos no son novedosas en absoluto, siendo apoyadas por todos los partidos populistas ya sean de extrema izquierda o de extrema derecha (ver Le Pen en Francia). Los extremos se tocan y coinciden en prácticamente todas las medidas económicas.
Algunas propuestas de Podemos son las siguientes: establecimiento de una renta básica para todos los ciudadanos, aumento del salario mínimo, establecimiento de salarios máximos, adelantamiento de la jubilación, prohibición de despido en las empresas con beneficios, introducción de la Tasa Tobin, impuesto sobre el patrimonio, supresión de las SICAV, nacionalización de la banca, energía, educación, sanidad, telecomunicaciones y demás sectores «estratégicos», salida del euro, impago de la deuda, expropiación de viviendas, supresión de cualquier límite de déficit e incremento notable del gasto público entre muchísimas otras medidas.
Todas estas medidas implican una inmensa (e irrealizable) redistribución de la renta. Me gustaría centrarme en algunas de las innumerables consecuencias sociales que tendrían estas medidas de transferencias de ingresos:
– Se desincentiva la producción y la generación de ingresos ya que los individuos saben que van a perder una gran parte de las ganancias. Una dedicación y esfuerzo extra ya no compensan.
– Aumenta la evasión fiscal y la economía sumergida. Los agentes están dispuestos a correr riesgos debido a la gran extracción de renta que sufren.
– Se desalienta que los beneficiarios de las transferencias generen ingresos en el presente, ya que pueden recibir un ingreso realizando menos esfuerzo o incluso ninguno. Si desean un mayor ingreso, generalmente éste se consigue en la economía sumergida.
– Los beneficiarios de ingresos se desentienden de producir bienes y servicios que la sociedad demande. Por tanto, se vuelven agentes antisociales.
– También desincentiva la producción de ingresos futuros, por lo que cualquier inversión actual destinada a proporcionar más renta en el futuro se paraliza o ni siquiera se plantea: educación, experiencia laboral, etc.
– Relacionada con la anterior, los individuos ya no se centran en crear valor en la sociedad sino en extraer rentas de la sociedad a través del Estado.
– Crea individuos totalmente dependientes de los gobiernos al provenir sus ingresos de éstos.
– Producen conflictos políticos ya que los distintos grupos de presión luchan entre sí por obtener más transferencias a costa del resto.
– Se crean conflictos sociales entre grupos productores de ingresos y los destinatarios de los mismos. Unos intentan defender su producción y los otros actúan políticamente para aumentar las transferencias.
– Los productores de ingresos se vuelven más desapegados de la comunidad al sentirse explotados.
– Relacionado con la anterior, los productores de ingresos participan menos en las instituciones sociales. Sociedad civil menos participativa.
– Los productores de ingresos que generan más valor en la sociedad son atraídos del exterior y abandonan el país por la escasez de oportunidades y la situación económico-político-social.
– Se destruyen las asociaciones privadas voluntarias de ayuda y asistencia, ya que el gobierno monopoliza coactivamente todas esas funciones por demanda social.
– Aumenta el populismo y se diluye la oposición política al existir una creciente parte de la población que depende económicamente del gobierno.
– Un aumento de transferencias produce un aumento constante de burocracia, que consume recursos (escasos) y defiende sus intereses.
– Paradoja del intervencionismo: los problemas crecientes causados por el intervencionismo político intentan ser resueltos creando más burocracia y controles, es decir, aumentando el peso y las dimensiones del Estado.
– Aumento creciente de la corrupción y el clientelismo.
– Los gobiernos se vuelven cada vez más invasivos, reduciendo libertades individuales.
Las conclusiones sociales de estas propuestas son claras y evidentes: sociedad más pobre, más rencorosa, más politizada, más desapegada, más enfrentada, menos cooperativa, menos unida, menos autónoma y menos libre.
1 Comentario
Este país se ha convertido en
Este país se ha convertido en un fraude de trabajo y de ideas para el crecimiento social y económico gracias a unos señoritos de muy mala educación i de poca vergüenza yo como muchos españolitos por no decir resignados tenemos que aguantar la cara dura de que todo esta bien y que la economía esta subiendo pero que pasa con la mayoría de familias en situación de precariedad es que no cuentan es que solo vale el voto o es que el poder es una meta señores seamos sensatos y no derrumbemos lo que hicieron construir la democracia con sangre y lágrimas se acabo el protagonismo en país de personas que no nos cambien por números para sus intereses de lo contrario un golpe de estado despertemos y que la experiencia nos haga ver la luz ya esta bien de que jueguen con nuestra sociedad seamos nosotros los que decidimos por nosotros no ellos empezemos a ser mas españoles que europeos esto nos ha demostrado los resultados del fondo monetario en fin faltan políticos de buena formación y mas sensibles a la hora de tomar decisiones