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Antitrasvasista, pero muy de centro

Publicado en Libertad Digital

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Sus votantes levantinos, en cambio, han recibido la noticia con cierta prevención. No porque la chica sea mala persona ni mucho menos, de hecho parece más buena que el pan, sino por su particular forma de entender la solidaridad interterritorial en materia de recursos hídricos.

Cospedal, recordemos, fue la primera en estampar su firma en el nuevo estatuto de Castilla-La Mancha, que sitúa el límite de la vigencia del trasvase Tajo-Segura en el año 2015. Dentro de siete años escasos, gracias a la flamante secretaria general del PP, se acabó el trasvase, sean cuales sean las condiciones de los pantanos de la cabecera del Tajo, y sea como sea también de dramática la escasez de agua en las provincias de Almería, Murcia y Alicante.

Su visión de los grandes asuntos de estado en clave nacional es, digamos, algo peculiar. En realidad, y por lo que refiere al caso concreto del agua, su punto de vista no es distinto de los nacionalistas catalanes, pues si el trasvase Tajo-Segura tuviera que empezar a construirse ahora, Cospedal sería, sin duda, la primera en encabezar las manifestaciones oponiéndose a su realización.

En declaraciones a las agencias de noticias, la política manchega ha estrenado su cargo arremetiendo nuevamente contra el trasvase del Tajo. En su opinión es una obra que "tiene que desaparecer". Por su parte, la ponencia económica del congreso "titánico" del PP, afirma respecto al problema del agua la necesidad de "recuperar la planificación hidrológica y el carácter nacional del recurso, rompiendo la actual tendencia a su "territorialización". Pero no se preocupen, dice Mariló, que no hay ninguna contradicción. Es sólo un arcano más del centrismo renovador, cuyos efectos sociopolíticos se escapan al común de los mortales. Los centristas, en efecto, no tienen ningún problema en votar una ponencia que afirma el carácter nacional de los recursos hídricos y, al mismo tiempo, reclamar la desaparición de uno de los grandes proyectos vertebradores de la nación sólo porque los recursos naturales provienen de la región en la que se presentan a las elecciones.

La prueba del nueve de que la chica está en la onda del nuevo régimen, que convierte España en un conjunto de nacioncitas mal avenidas, la hemos tenido al día siguiente de su cooptación a la Secretaría General del PP: De la Vega está encantada con su nombramiento. Como Camps. Como Valcárcel. ¡Viva el centrismo! Y el que no tenga agua que se fastidie. Haber nacido más al norte.

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