El PP subirá los impuestos a las empresas en más de 500 millones de euros.
Son muchos los que están diciendo que la reforma del Impuesto de Sociedades propuesta por el PP no es una subida de impuestos. El argumento es cierto a un nivel superficial y divulgativo (yo mismo lo he utilizado en prensa), pero no conviene insistir demasiado en él porque no es enteramente cierto.
Me explico: el PP pretende aumentar la recaudación en 2017 por Sociedades en 6.000 millones de euros y lo hará adelantando ingresos de 2018. En 2018, deberá devolver a las compañías esos 6.000 millones cobrados de más pero a su vez adelantará el cobro de otros 6.000 millones de euros correspondientes a 2019 (es decir, el aumento de recaudación será cero en 2018). En 2019, repetirá la operación: devolverá los 6.000 millones recaudados de más en 2018 y adelantará 6.000 millones de 2020 (efecto igualmente cero). Si suponemos que en 2020 ya no adelanta recaudación alguna de 2021, en este año los ingresos por el Impuesto de Sociedades caerán en 6.000 millones. Aparentemente, lo comido por lo servido: 6.000 millones pagado de más en 2017 que se devuelven en 2020 (impacto recaudatorio igual a cero).
Ahora bien, como cualquier economista sabe, el dinero no tiene el mismo valor en distintos momentos del tiempo. No es lo mismo disponer de 10.000 euros hoy que tenerlos dentro de 50 años. Justamente, para comparar ingresos ubicados en distintos momentos del tiempo, lo que se hace es descontarlos al tipo de interés de mercado.
Apliquemos este método a la reforma de Sociedades del PP: el conjunto del sector empresarial pagará 6.000 millones de euros más en impuestos en el año 2017; si suponemos que la medida expirará a final de legislatura (2020), ese mismo sector empresarial no pagará de más ni en 2018 ni en 2019, y abonará 6.000 millones de menos en 2020. Su flujo esperado de caja por la reforma del Impuesto de Sociedades es: -6.000 (2017), 0 (2018), 0 (2019) y +6000 (2020). Si descontamos estos flujos de caja a un tipo de interés del 3% (bastante inferior a aquel al que pueden financiarse la mayoría de empresas), los flujos de caja equivalentes en valor temporal son: -6.000 (2017), 0 (2018), 0 (2019) y +5.490 (2020).
Es decir, si la medida expira en cuatro años y el tipo de descuento es el 3%, el PP subirá los impuestos a las empresas en más de 500 millones de euros. Si, en cambio, suponemos que la medida dura dos legislaturas y el tipo de descuento es del 5%, la subida sería de casi 2.000 millones de euros.
En definitiva, el PP SÍ pretende subir los impuestos a las empresas. No en 6.000 millones de euros, sino en una cantidad todavía por determinar (según cuánto dure el incremento de los pagos fraccionados), pero los sube. Está bien distinguir entre aumento del tipo impositivo y adelanto del cobro, pero no forcemos demasiado ese argumento para negar que hay un aumento impositivo sobre las empresas porque estrictamente NO es correcto.