El exilio del rey Juan Carlos es el último movimiento tectónico dentro de la institución real española. Creo que es una decisión errónea, por las mismas razones que expresó Cristina
Iván Redondo despierta una admiración sin aristas. Su inteligencia descuella sobre las demás, y quienes le han conocido no dejan de señalarlo. “Nunca he tenido a un alumno más brillante
Los responsables de los actos del Rey Juan Carlos I fueron los presidentes del Gobierno anteriores.
Como decía el viejo Schumpeter, el capitalismo sigue sin disponer de trovadores que canten sus gestas.
Socialdemócratas y democristianos piensan que la burocracia no es eficiente porque aún no les han dejado montar una oficina de proyectos a ellos.
La epistocracia tiene poco de libertario y mucho de envoltorio del poder político actualmente existente.
La prueba definitiva para unos y otros será afrontar el alcance de la crisis económica en los próximos meses.
Como sociedad debemos elegir si queremos ser los Estados Unidos de Franklin D. Roosevelt o una nación fracasada como la Argentina de Perón.
Lo que nos ofrece esta nueva generación es un Estado mucho más fuerte y menos libertades de las que ahora disfrutamos.
Algo está pasando en la política española que nos recuerda la Venezuela de Chávez en sus inicios.