Autonomía universitaria, ideal perdido
¿Dónde quedó la autonomía universitaria? Se puede ver que cualquier universidad pública, que vive del erario, se convierte en una burocracia sin cerebro.
¿Dónde quedó la autonomía universitaria? Se puede ver que cualquier universidad pública, que vive del erario, se convierte en una burocracia sin cerebro.
Cualquier universidad pública que carezca de autonomía se convierte en una burocracia; sin cerebro, sin interés por innovar, ni tomar decisiones propias.
Las universidades son como las grandes tabacaleras: nunca van a ser buenos lugares llenos de buena gente, y tenéis que aceptarlo. Por mucho que te gusten, los cigarrillos te matarán. El número de las universidades está en proceso de ascender.
Los donantes deberían redirigir sus contribuciones a apoyar la creación de vías significativas hacia la edad adulta distintas de la educación universitaria,
Las reacciones en las universidades a la masacre de Hamás del 7 de octubre han despertado por fin a muchos antiguos alumnos, obligándoles a reconocer la toma de poder woke de sus alma mater.
La clave está en cambiar el sistema de financiamiento. Es posible modificar aprovechando la propiedad de autonomía concedida por el gobierno.